Hoy en una clase de literatura (mi materia preferida), mi
profesora nos había mandando a leer la semana pasada “En la colonia
penitenciaria” de Kafka para hoy. Nos había encargado como tarea que lo analizáramos
y que luego tendríamos que dar la clase nosotros, explicando lo que
comprendimos y logramos identificar del cuento. El punto es que un compañero
dijo que “Seguro Kafka tuvo que vivir alguna experiencia parecida a la que
transcurre en el cuento porque sino no hubiera podido escribir lo que escribió”
a lo que otra compañera agregó “Seguro que Kafka escribe dejando algo de su
vida en cada libro o cuento”. Mi profesora de literatura se quedó mirándolos
como “no pueden estar diciéndome esto”, intentó explicar que un escritor no
tiene por qué haber vivido las cosas que escribe, a caso, ¿un escritor que
escribe sobre la muerte tuvo que vivir la muerte? ¿Un escritor que escribe
sobre un asesinato tuvo que haber asesinado a alguien? ¿Un escritor de ciencia
ficción tuvo que haber visto aliens y haber vivido en otros planetas? Algo que si uno se plantea y lo piensa mínimamente,
tiene mucha lógica, porque es claro que un escritor lo que hace es imaginar y
no contar su vida en lo que escribe, a nadie de mi curso le entraba en la
cabeza que la imaginación es la fuente de creatividad.
Esta situación me alarmó bastante porque… ¿nadie se puso a
pensar que alguna vez en la historia de la humanidad, en alguna parte del
mundo, a un hombre se le ocurrió colocar sus manos en forma de cuenco para
tomar el agua del río y que, a su vez, otro hombre lo estaba mirando e imaginó que esa misma forma
de las manos podía ser transformada en un objeto, que en la actualidad la
conocemos como “vaso”? ¿Nadie se puso alguna vez a pensar en que si el hombre
no hubiera imaginado hoy no estaríamos donde estamos? Si el hombre no hubiera
visto en su mente una “rueda” en movimiento, nunca se le hubiera ocurrido pulir
una roca y comenzar a arrastrar objetos, el objeto “rueda” hoy no existiría.
Es decir, el hombre es un ser conciente, capaz de imaginar y razonar, eso es lo
que nos diferencia del resto de los animales. Alguna vez en la historia a alguien se le ocurrió
hacer algo por primera vez, y así fuimos evolucionando hasta el día de hoy. La imaginación es todo.
Nosotros creemos que porque desde que nacimos conocemos la
computadora, la televisión, la mesa, los cubiertos, siempre estuvieron ahí. Pero
nunca nos ponemos a pensar que alguna vez no fue así, que en algún momento no
existía nada de lo que actualmente forma parte de nuestra vida de forma tan
cotidiana. Creemos que dependemos de la televisión, la computadora, que sin eso
no podemos vivir. Les pongo una situación: Si estamos caminando y vemos a
alguien que conocemos pero nos olvidamos de saludarlo, nunca volvemos para atrás.
En cambio, si salimos de nuestras casas y nos damos cuenta de que nos olvidamos
el celular, somos capaces de bajar del colectivo y correr a buscarlo. Todo muy
lindo con la tecnología, pero ¿y las personas? ¿De qué me sirve estar con
alguien que no es capaz de leer los gestos de la cara porque está más
acostumbrado a hablar por chat que hablar personalmente? Las pantallas nos
distancian, hacen que creamos que sin ellas no podemos vivir. Estamos tan
automatizados, tan controlados, que
no podemos imaginar ni un solo día de nuestras vidas sin estar enfrente a una
computadora, jugando a la play o mirando la televisión. ¿Por qué? Porque la
gente que imagina, la gente que piensa, son la misma gente que nos dice que
miremos la televisión, que usemos la computadora, porque de esa forma nos tienen
completamente manipulados. No quieren que pensemos, no quieren que imaginemos,
quieren que creamos que todo lo que está inventado es todo lo que se puede
inventar. De esa forma somos esclavos inconcientes de la gente poderosa,
destinados a seguir un sistema de forma totalmente inconciente, haciendo todo
lo que ellos quieren que hagamos.
Todos somos creativos, todos podemos imaginar, sólo que no
lo ejercitamos. Si estamos divagando entre una pantalla y la otra ¿qué es lo
que podemos imaginar si todo lo tenemos enfrente de nuestros ojos? No nos
tomamos un tiempo para pensar, para realmente plantearnos las cosas.
Los niños, por ejemplo, son extremadamente creativos: un
palo de escoba puede ser mil cosas menos un palo de escoba, un simple charco en
el piso puede ser un lago repleto de cocodrilos ¿y que hacen los padres? Corren
a comprarle una playstation, por más que el bebé no sepa ni caminar aún, salen
a comprarle todos los juguetes, para que el niño no se aburra. ¿Pero de dónde
creen que sale la creatividad? Sí, es necesario un poco de aburrimiento para
comenzar a divagar en la imaginación. Pero no, nadie quiere pensar, nadie quiere aburrirse. Todos quieren tener todo servido, al alcance de sus manos. El sistema quiere que no pensemos, quiere que no razonemos, y lo está logrando porque cada vez son menos las personas que se interesan por aprender, por conocer, por pensar. Un ejemplo claro son los adolescentes, cuanto menos estudien mejor, cuanto menos sepan mejor, cuanto menos se esfuercen, mejor y casualidad que sean los más controlados, los más consumistas. Alguna vez, la Universidad de Buenos Aires fué la mejor universidad del mundo, porque alguna vez los profesores le decían a sus alumnos "denme más, búsquen más, aprendan más, estudien más, no se queden con lo que dice en los libros, busquen más fuentes" mientras que hoy dicien "resuman" o con un poco de plata en el asunto, no hay título que no pueda ser falcificado.
No, un escritor no tiene que vivir las cosas que escribe. Un
escritor es capaz de imaginar una situación y describirla con detalles por más
que nunca haya vivenciado algo parecido. Un ser humano es capaz de crear un
mundo, fue capaz de imaginar y llevar a cabo todas las cosas que hoy nos
rodean. Mi pregunta es: ¡¿Qué es lo que estamos haciendo?!
"Un pájaro salió en busca de su jaula. Una jaula salió en busca de su pájaro" - Kafka
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