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No te importa quién tenés en frente más que tu propio reflejo en un espejo que miente. Lo que ven tus ojos  no sos vos en realidad, sos un engaño, sos una mentira. Tus ideales no son tuyos verdaderamente, son producto de una farsa que va a llevar poco a poco a la degradación masiva de la sociedad, perdida bajo un ente de control que nos dice qué y cómo hacer las cosas. Creés que lo tenés todo pero estás vacío, seco, caminando en un sendero en donde las hojas no pasan y se estancan en una única salida que lentamente se queda sin espacio, como tu mente, cargada de aire, sin la capacidad de pensar por vos mismo, queriendo que otros tomen las riendas de tu vida porque no tenés ganas de hacerlo por tu cuenta, porque estás estresado de tanto confort, porque nunca supiste encarar las situaciones, porque nunca vas a saber cómo hacerlo, las herramientas no fueron dadas en su momento y ya tu mente no divaga en esos predios, creés que está superado, creés que lo lograste. Pero no es así, mi amigo. Cada día estás más sólo, cada día estás más distanciado, creés que estás comunicado pero sólo estás conectado. El tiempo en el que te servían quedaron atrás, el momento de encontrarse sólo en el mundo está tocando la puerta, y no podés hacerle oídos sordos, ya no hay otra salida, no hay escape y menos para los cobardes. El tiempo corre, pegándonos en los talones cuando nos retrasamos, hacíendonos saber que cada día es una aproximación, un portal hacia el otro lado. No dejes que cada día sea sólo un pozo oscuro, molesto, y no te detengas en el chargo que dibuja tu silueta. Mirá más allá del pozo y contame qué es lo que vez. Mirá al rededor y decime si no hay otras personas mirando hacia el mismo lugar que vos. Entonces, una vez que recorras con tu vista al menos unos pocos metros, vas a notar que no sos el único. Y sólo cuando aprendas a mirar desde dentro hacia afuera, intentá ser alguien más. Ponete en los zapatos de otra persona, viví, sentí, deseá como si fueras alguien más. Pensá como si fueras otro, accioná como si no fuera tu cuerpo el que controlás y luego, cuando hayas podido disernir entre vos y alguien más, vas a poder comprender un poquito mejor la mente del humano y tal vez entiendas tus ideales, tu vida, tu mente, quizás consigas espacio, aire y...sólo tal vez, ya no estés tan vacío.