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jueves, 22 de septiembre de 2011

Quiero cortar de mi todo lo que odio.

Ya hasta me duele respirar. Es la segunda vez en la semana que regreso del colegio llorando y no puedo dejar de hacerlo durante horas hasta que se me secan los ojos y ya no quedan lágrimas por derramar. Absolutamente todo está mal y nunca estuvo peor, les juro que siento que todo de a poco se va demoliendo delante de mí y no puedo hacer nada para evitar que se destruya. Todo lo que me costó tanto trabajo mantener y superar de repente dio un vuelco y ahora siento que tengo el peso del mundo en mis hombros. Es un dolor y una frustración tan grande que ya no puedo calmar con nada, no tengo ni un solo respiro, ni siquiera un aliento, ya no me queda nada y lo digo de verdad.

Ni siquiera puedo pensar en cómo expresar en palabras lo que siento, es tan confuso y grande que no hayo palabras. Amor, familia, colegio, amigos, deseos, sueños, ideales, todo está cayendo en picada hacia un abismo sin fin. Todo se derrumba y trato de mantenerlo pero se me escurre por los dedos de las manos. No soy una persona fuerte, nunca lo fui. Soy débil y muy sensible, ahora estoy haciendo todo lo que sé y dando todo lo que tengo para mantenerme parada sobre mis pies. Me dan tantas ganas de dejar de existir, para dejar de sentir esto. Es realmente una mierda, pocas veces estuve TAN mal y eso que he estado mal. Ya hasta dudo de mí misma, dudo de todo lo que antes tenía claro. Todo se nubló y siento que me desarmo en el mismo lugar una y otra vez, es como si estuviese arriba de un carrusel, girando hasta marearme.

Estoy escuchando “Stop Crying Your Heart” de Oasis. Entre las TANTAS cosas que me recuerdan a vos está esa canción. Me estoy autodestruyendo escuchando esto pero no puedo dejar de hacerlo. Te extraño tanto. A veces me arrepiento de no haberte echo saber lo mucho que significas para mi y de haberme negado a vos durante tanto tiempo. Como una idiota oculté todo lo que sentía porque tenía miedo, mientas voz dabas todo lo que tenías para que yo estuviera a tu lado. Durante el tiempo que estuvimos juntos nunca me di cuenta de lo muy significativo que eras en mi vida y ahora que no te tengo puedo sentir ese vacío, las incontrolables lágrimas que surgen cuando me doy cuenta de que no te tengo y el gran deseo de volver a estar entre tus brazos, sin pensar en lo mucho que estoy extrañándote cada día.

Ellos ni se imaginan lo que me pasa. A ellos ni les importa lo que sienta, tampoco les importa sin me lastiman. A ellos todo les sale bien, ellos nunca entenderían…

¡No puedo creer que todo esté tan mal! ¡TODO!

¿Volverás a casa para detener el dolor?

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