Tan silencioso como está todo esta noche, por poco creíste que estabas a salvo. Tus ojos estan llenos de sorpresas, no pueden predecir mi destino.

Esperando bajo las estrellas, hay algo que deverías saber. Los ángeles rodean mi corazón diciéndome que te deje ir. Por poco no pude, casi no pude reconocer. Pero me metí de cabeza en este juego ¿Quien soy yo para criticar? De alguna manera saldré de esto y ni te darás cuenta, engañado por tu propio disfraz.

Es como si una y otra vez me tiraras contra el piso, simplemente devería marcharme. Una y otra vez sigo volviendo por más, juego en tu fantasía. Ahora que se ha terminado, no puedes mentirme con tu sonrisa, he visto dentro de tus ojos. Ahora que estoy bien, ya no me intoxicaras la mente, ni el diablo te reconocería, pero yo si.

Escondes tu tristesa en una sonrisa y guardas tu corazón roto y perdido. Los pasos que das al borde del abismo son mucho más altos de lo que parecen, pero yo he estado en ese abismo antes, no puedes esconderte de mi.